Había una vez un niño pobre que vivía en China y estaba sentado en la acera, a la puerta de su casa. Lo que más deseaba en este mundo era un caballo, pero no tenía dinero. Justo ese día pasó por su calle una manada de caballos con un potrillo incapaz de acompañar al grupo. El dueño de la manada, que conocía el deseo del niño, le preguntó si quería el potro. Exultante, el niño aceptó. Un vecino, al saber lo ocurrido, dijo al padre del niño que su hijo tenía mucha suerte. El padre le preguntó por qué, y el vecino respondió:
cuentos zen cortos para reflexionar
viernes, 29 de abril de 2016
domingo, 24 de abril de 2016
Cuento Zen; Las tres preguntas
El discípulo se dirigió
al maestro para tener un encuentro espiritual.
sábado, 23 de abril de 2016
Cuento Taoista; La lengua y los dientes
Mientras Chang Chuang, el maestro de Lao Tsé estaba enfermo, éste fue a visitarlo y le dijo:
Cuento para reflexionar; ¿Qué pides a cambio de tu alma?
Una vez Satanás, que
hablaba con un hombre, le dijo:
viernes, 22 de abril de 2016
Cuento Zen; El florero de porcelana
El gran maestro y el guardián dividían la administración de un monasterio Zen. Cierto día, el guardián murió y fue preciso substituirlo. El gran maestro reunió a todos los discípulos para escoger, quién tendría la honra de trabajar directamente a su lado. - "Voy a presentarles un problema" -dice el Gran Maestro- "Y aquel que lo resuelva primero, será el nuevo guardián del templo". Terminado su corto discurso, colocó un banquito en el centro de la sala...
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